Estas últimas semanas han sido bastante ilustrativas, no señores, no deje el blog, ni me conseguí novia, ni mucho menos! ¿Un agarre? Sería bueno, pero no, el motivo de mi ausencia fue porque estuve enclaustrado en dos dilemas amorosos en los cuales yo no tuve protagonismo alguno, y ese fue el problema, una vez más.Vamos con el primero. Siempre existe esa chica linda, que sabes que le gustas y que a ti también te gusta, bueno no siempre. Está bien diré la verdad, POR FIN! Había una chica que me gustaba y que yo también le gustaba, casi siempre soy víctima de alguna cazadora furtiva que lanza sus redes al primer pavo conformista que pasa por ahí, y la cazadora usualmente consigue su pavo, lo rellena con sabrosas meriendas y se lo engulle por todo el fin de semana, para que el lunes siguiente el dichoso pavo sea una montañita de huesitos y dudas en la cabeza, preguntándose, ¿la llamo o no la llamo?, ¿solo es un agarre o puede ser algo más serio?. Como casi siempre sucede el cazador tiene la ventaja de decisión sobre el futuro de la presa.
En fin, esta vez no había cazadora furtiva ni pavo víctima, esta vez, era un interés reciproco, por que más de una vez me dijo con la palabras exactas que YO SI LE GUSTABA, obviamente después de la confesión de que ella también me gustaba, así que más que un interés era un simple gusto, una atracción tacita y corpórea, o sea, nos teníamos ganas, lo cual se reflejo con uno que otro agarre espontaneo de MUY de vez en cuando (dos veces para ser exacto, y las dos en estado casi etílico).
Como esta chica es linda y yo le gusto, pensé porque no adentrarme más en el asunto para ver qué pasa, no digo mandármela y ser novios de sopapo! No! Simplemente conocernos de un modo más personal, ya no como amigos que una vez agarraron, sino saber quien realmente era esa señorita por dentro, para que después esa asquerosa pregunta de “que hubiera pasado si…”no me destruyera la cabeza imaginándome todo un futuro irreal y utópico con ella, porque les digo que ya me paso y no es nada bonito irse lamentándose en cada esquina de la calle del desamor, aullándole a la luna cual perro abandonado debajo de una farol y cantando “Y si fuera ella” de mi pata Alejo Sanz.
Así que manos a la obra, la fui a buscar a la hora de salida de sus clases para ver si podía acompañarla a su casa ya que vivía cerca de la universidad o invitarla un café o algo. Esperé por ella y como es de esperar, salió con todo su sequito de amigas, felizmente se fue desintegrando y una a una se fueron despidiendo en cuanto llegábamos a la salida de la universidad. Ya al último solo quedaba ella, una amiga más y yo. Su amiga me pregunto que si quería acompañarlas, respondí con un sobrio y sereno “claro!, porque no” pero por dentro deseaba que me dejara solo con ella para poder hablar de nosotros!, pero en fin, la amiga nos acompaño todo el trayecto, pensé que cuando llegáramos a su casa ella se iba a ir, pero NO! Se quedo, era el tercio perfecto, pero no me importo, empecé a soltar toda la hilera de frases coquetonas que me sabia, esa trama de palabras medias trilladas y cómicas para sacarle uno que otra respuesta que me dejara pensar que ella también quería algo mas, pero no pude, lo que lo logre fue arrancarle una que otra risa y carcajada, porque yo, soy un cage de risa, o al menos eso me repetía a cada rato, pero no me dijo nada mas, nunca apareció algo coquetón, algo que denotara un intereses carnal nunca apareció, al punto que se me gastaron todas mis líneas y hasta me aburrí de no encontrar respuesta ingeniosa, ya que solo me respondía con risitas y con esa frasecita que alentaba mi carrera de comediante.
Después de una sesión de la comedia de mi vida, se hizo tarde y me tenía que ir, y la amiga seguía ahí, así que decidimos irnos juntos. En el camino me menciono que ella era así, una chica de pocas palabras y menos de frases ingeniosas y tan solo era de risitas coquetonas, me pareció extraño que dijera eso de su propia amiga, tenía dos teorías, o era la típica amiga puñalera o estaba afanándome. La acompañe a tomar su carro y me fui caminando a mi casa para pensar un poco. Cuando llegue a mi casa empecé a revisar las conversaciones pasadas que había tenido por el MSN con esta señorita de risitas coquetonas, y para mi sorpresa, era verdad! Me di cuenta que no era de frases inteligentes ni conversaciones fluidas, siempre el que hablaba más era yo.
Una semana después la señorita con la cual pude fantasear un par de veces una relación seria, al fin tenía una relación de verdad!, el único inconveniente fue que no era conmigo, si señores lectores, ya tenía flaco y no era yo!
Ahí concluí algunas cosas: nosotros nunca tuvimos química más que la suficiente para agarrar un par de veces; y lo que es peor, su amiga decía la verdad y no me estaba afanando, porque lo admito, estaba linda!
¿Y el segundo dilema amoroso excluyente de mi persona? En estos días averiguare como realmente termina…
Deséenme suerte!
